El diseño de las cosas cotidianas de Don Norman es una obra fundamental que transforma nuestra comprensión sobre el diseño y su impacto en la vida diaria. Norman, pionero en la relación entre las personas y la tecnología, nos invita a reflexionar sobre cómo los objetos que utilizamos a diario pueden ser tanto una fuente de frustración como de satisfacción. A través de ejemplos accesibles y situaciones cotidianas, revela que el mal diseño no es culpa del usuario, sino de un enfoque que ignora las necesidades humanas. Desde puertas confusas hasta controles complicados, Norman analiza cómo un diseño deficiente puede generar confusión y descontento. A lo largo de sus páginas, se exploran conceptos clave como la visibilidad, las relaciones naturales entre funciones y controles, y la importancia de la retroalimentación.
La combinación de unas buenas capacidades de observación y de unos buenos principios en materia de diseño es una herramienta potente al alcance de cualquiera, incluso de quienes no se dedican profesionalmente al diseño. ¿Por qué? Porque en última instancia todos somos diseñadores, en el sentido de que todos diseñamos de forma deliberada nuestra vida, nuestro dormitorio y nuestra manera de hacer las cosas; sabemos diseñar asimismo métodos alternativos, formas de superar los fallos de dispositivos existentes. Así pues, una de las finalidades de este libro es devolverle a la gente el control sobre los productos de su vida: enseñarle a seleccionar diseños útiles y entendibles y a arreglar los que no lo son tanto.